Guía clínica D vitamina C Las experiencias clínicas de Frederick R. Klenner, MD., abreviado, resumido y anotado por Lendon H. Smith, MD.
“Prefacio por Linus Pauling, Ph.D.
Los primeros artículos del Dr. Fred R. Klenner brindan mucha información sobre el uso de grandes dosis de vitamina C para prevenir y tratar muchas enfermedades. Estos papeles siguen siendo importantes. El Dr. Lendon Smith ha prestado un valioso servicio al poner a disposición del público el trabajo del Dr. Klenner. Introducción Tengo ante mí las palabras publicadas de Frederick Robert Klenner, B.S., M.S., M.D., F.C.C.P., F.A.A.F.P. Se graduó de la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke en 1936. Después de tres años de capacitación en el hospital, ingresó a la práctica privada de la medicina en Reidsville, Carolina del Norte. Su principal subespecialidad eran las enfermedades del tórax, pero se interesó en el uso de dosis masivas de vitamina C en el tratamiento de enfermedades virales y otras enfermedades. Inspiró a Linus Pauling e Irwin Stone a expandir la investigación sobre los grandes beneficios de la vitamina C. El Dr. Klenner murió en 1984.
Lo que sigue es una revisión y abreviatura, un resumen y una crítica de los 27 artículos científicos que escribió. A la luz de los desarrollos e investigaciones recientes en el uso de la vitamina C, es esencial que se revisen las raíces de su uso. Brevemente, la vitamina C atenúa la mayoría de las infecciones virales al ayudar a la producción de interferón, controla muchos tipos de cáncer, alivia algunas depresiones, modifica mucho el dolor y cambia el curso de muchas enfermedades, como la esclerosis múltiple, la esclerosis lateral amiotrófica, las picaduras de arañas, las picaduras de insectos venenosos. insectos y reptiles.
La consigna es: “En caso de duda, administre vitamina C”.
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En 1949, el Dr. Klenner informó del tratamiento con éxito de la poliomielitis, la difteria, el herpes zóster, el herpes simple, la varicela, la gripe, el sarampión, las paperas y la neumonía vírica con inyecciones de grandes dosis de vitamina C. “Los resultados”, escribió, “que hemos comunicado en enfermedades víricas utilizando vitamina C como antibiótico pueden parecer fantásticos”.